José Solorzano 
Como una interpretación de lo complicado que es construir una relación amorosa, Raquel Sofía estrenó “Aprendiendo Catalán” que, en compañía de la pluma de Alejandra Zeguer, puntualiza la angustia de comunicar los desacuerdos y conflictos que experimentan las conexiones interpersonales a causa de las inseguridades tempranas que experimenta alguno de los protagonistas.
Raquel Sofía plasma la desconfianza, los celos y el miedo como desconfiguraciones por las que se puede cruzar la edificación sana y eficiente de una relación amorosa. En menos de tres minutos, la puertorriqueña provoca un sentimiento de frustración y miedo al demérito de las acciones encaminadas a la paz de una compañía amorosa estable, mientras que empapa la letra de amor y búsqueda de la comprensión a la persona que se gusta o ama.
“Tengo el corazón cansado de que no veas lo que hago y una vez al mes tener que convencerte” es la estrofa emblema que “Aprendiendo Catalán” utiliza para aludir al miedo de que la indecisión gane sobre el amor.
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Por otro lado, el nombre del sencillo busca ejemplificar lo difícil que es lograr el entendimiento dentro de las relaciones amorosas, tal como lo puede llegar a ser el aprender un nuevo idioma.
Raquel Sofía le da un respiro al desamor
Luego de tres sencillos inmersos en la desilusión amorosa durante lo que va del año –“Caracas”, “Demasiado Poco – Demasiado Tarde” y “Domingo de Extrañarte”- la también autora de 'Lecciones De Una Vida Cagándola En El Amor' retoma las letras inquietas por iniciar, fortalecer y transitar en un romance; sentimientos que no se percibían desde 2021, pues cada una de sus líricas se envolvían en el dolor y terror por los desastres amorosos.
Además, la canción entabla una relación con “Ciudad Sin Mar”, sencillo de 2021, que describe lo contrario a “Aprendiendo Catalán”, o sea, el desequilibrio que el amor puede causar en sí misma, ahora siendo ella quién pudiera desconfigurar la conexión amorosa.
“Aprendiendo Catalán” funge como un pequeño recordatorio a la confianza, comunicación y empatía en el arranque o desarrollo de una relación, pues, aunque muestra los retos por los cuales esta tiene que pasar, finaliza por entonar “yo te lo juro que no hay nada en este mundo más seguro que tú y yo”.
