
El 31 de enero de 2012 se estrenó Visions, el tercer álbum de estudio de Claire Boucher, mejor conocida como Grimes, quien lo produjo en completo aislamiento desde su departamento, sin dormir ni comer y en un periodo de tres semanas. El resultado fue una fascinante mezcla que oscila entre el dream pop y el electro pop, con sonidos R&B.
El método de trabajo de la cantante canadiense puede parecer extremo, pero en lugar de ser contraproducente, la falta de estímulos a los que se sometió Grimes causó que su subconsciente llenara los espacios en blanco: “Era como si supiera exactamente qué hacer a continuación, como si mis canciones ya estuvieran escritas“, declaró la artista de entonces 24 años en entrevista con The Guardian en 2012.
Las virtudes del DIY y la cultura del internet
Sin embargo, un estímulo que sí estuvo presente durante la grabación del álbum fue el internet y las computadoras, pues produjo todo el material en el programa GarageBand. Para la cantante, el internet tiene una relevancia fundamental en su música debido a que, en su adolescencia, no había tocado ningún instrumento, pero investigó y aprendió todo lo que pudo sobre esta, lo que demuestra la importancia y el alcance de lo virtual en el mundo de la música.
El álbum también destaca por sus letras. Grimes habla sobre un periodo de su vida donde fue adicta a las drogas y sufrió la muerte de dos de sus mejores amigos, también fue agredida sexualmente, tema del que habla en “Oblivion”: “Una camino después del anochecer. Es mi punto de vista. Porque alguien podría romperse el cuello“, narra la canción. Claire declaró para la revista de música Spin en 2012: “La canción se refiere a que fui violada y pasé por un periodo muy difícil para volver a involucrarme en cualquier tipo de la relación con hombres, porque por un tiempo me aterrorizaron mucho“.
El sonido único de Visions le valió la posición número 98 en los Billboard 200, así como ser considerado por el sitio web británico NME como el 252° mejor álbum de todos los tiempos. También destacan los sencillos “Oblivion”, el cual fue nombrado como la segunda mejor canción de la década según Pitchfork, y “Génesis”, considerada dentro de las 10 mejores canciones del 2012 según Rolling Stone.