Mia Esmo 
Hace dos años, bajo el ojo creativo de la directora Sofia Coppola y la actuación de la supermodelo Kate Moss, la banda estadounidense The White Stripes estrenaba el video oficial de la canción “I Don't Know What To Do With Myself”, perteneciente al álbum ‘Elephant’.
Con motivo del aniversario número 20 de su cuarto álbum de estudio, The White Stripes lanzó una edición deluxe del disco ‘Elephant’. Este incluye las versiones remasterizadas de las 14 canciones originales del álbum, más 27 interpretaciones en vivo del Tour Elephant en el Aragon Ballroom de Chicago el 2 de julio del 2003.
En el video apreciamos a una Kate Moss muy sensual y atrevida realizando un pole dance al son de una canción tan melancólica como “I Just Don't Know What To Do With Myself”. Una melodía que explora el amargo sabor que nos deja una ruptura, la sensación de sentirnos incompletos porque todo lo hacíamos con esa persona y la necesidad de que regrese para que todo vuelva a tener sentido en nuestras vidas.
Los fanáticos recibieron el video musical con gran euforia, no solo por el papel protagónico de Kate Moss, sino también por la dirección de Sofia Coppola. Algo muy característico de Coppola es el uso de colores pastel, y aunque en este es la excepción, no se aleja de sus clásicos ejes temáticos: una protagonista joven y sensual con una canción de fondo que grita desesperación y crisis. Y como un guiño, para la película Somewhere, estrenada en 2010, vimos una escena similar: dos gemelas rubias en un streaptease.
No es la primera vez que la cineasta dirige un video musical. Anteriormente trabajó en los videoclips de “Playground Love” de la banda Air y “City Girl” de Kevin Shields. Ambos implementan, respectivamente, fragmentos de dos de las más famosas películas de Coppola para enriquecer la trama. No es necesario ver los filmes para entender los videos, pero el espectador lo agradece.
Lo que hace tan interesante y cautivador el video de “I Just Don´t Know What to Do With Myself” es el poco uso de elementos y palabras, que se complementan para transmitirle al oyente la melancolía y desesperación del vocalista. La crisis existencial que externa la letra de la canción trabaja de manera perfecta con las ideas de Sofia Coppola, y entrega una pieza que no necesita mucho para hacernos sentir el dolor como propio. El video se convierte en un apoyo visual que termina por enriquecer la canción y conectar con la audiencia.
