De Muse a Collective Soul: la piel musical de Twilight

De Muse a Collective Soul: la piel musical de Twilight

¿Qué pasa cuando mezclas rebeldía, vampiros, triángulos amorosos y música enérgica y melancólica? Obtienes una de las sagas más exitosas y con un universo emocional tan profundo que conecta con más de uno.

En 2008, Twilight  llegó como adaptación de la novela del mismo nombre para explorar la complejidad de las relaciones humanas, la identidad y madurez a partir de la historia de amor entre una adolescente y un vampiro, construyendo su propia identidad a través de la historia escrita por Stephanie Meyer, que en la pantalla se enriqueció con una banda sonora capaz de reflejar la  intensidad del primer amor, tensión y misterio que se desarrollaba en un universo que fusiona realidad y fantasía.

A continuación repasamos algunas de  las canciones que forman parte de la primera entrega de la saga que ha acompañado a más de una generación, aún a más de 15 años de su estreno.

“Tremble for My Beloved” – Collective Soul

Esta balada rock subraya la tensión del rescate de Bella, fusionando emoción con adrenalina. Collective Soul hace su aparición en uno de los momentos más intensos de la película, marcando la adrenalina y tensión durante la escena en la que Edward salva a Bella de ser atropellada, mostrando fuerza sobrehumana. La mezcla entre la tensión de la escena y la energía de “Tremble for My Beloved” es una mezcla imposible de olvidar.  

“Supermassive Black Hole” – Muse

Otra de las escenas que más recordamos es el juego de béisbol de los Cullen, donde hacen muestra ante Bella de su fuerza sobrenatural, y que, con “Supermassive Black Hole” se convierte en una atmósfera misteriosa, atrevida y estilizada, tal como es la familia Cullen.

“Flightless Bird, American Mouth” – Iron & Wine

Entre momentos cargados de energía y tensión, aparece uno de los primeros momentos de conexión íntima durante la escena del baile de Edward y Bella. Melancolía, ternura, paz y esperanza inundan uno de los acercamientos más memorables entre la pareja, rompiendo la estética oscura de la trama, convirtiendo al tema de Iron & Wine en uno de los más memorables. 

“Leave Out All the Rest” – Linkin Park

Linkin Park hace su aparición durante los créditos finales con una letra que grita redención y lucha interna. Una de las canciones más emblemáticas del soundtrack de la primera entrega que mezcla rock alternativo, electrónica y la voz inolvidable de Chester Bennington que, con el paso del tiempo se ha convertido en una joya infravalorada y que, tras la partida del intérprete cobra un sentido más profundo y emotivo. 

“Decode” – Paramore

Uno de los himnos adolescentes de la época y de los temas más emblemáticos de la saga y la historia de Paramore. En la voz de Hayley Williams encontramos un himno emo que refleja la confusión, ira e intensidad del amor adolescente. Paramore llega para gritar con fuerza sobre lo que en el fondo decidimos callar, como un intento para descifrar aquello que no podemos comprender en el otro. Hayley se convierte en la voz de Bella, quien intenta entender la naturaleza desconocida de su novio vampiro.

Bonus: “Let Me Sign” – Robert Pattinson 

Entre el aura misteriosa que envuelve a Edward, aparece “Let Me Sign” cómo un vistazo de la humanidad y vulnerabilidad que hay dentro de él. Dramático, intenso, artístico e inesperado; el tema interpretado por Robert Pattinson es una joya más para recordar.

De Forks, para el mundo

El mundo de Twilight se ha mantenido vigente a través de los años y sus canciones son en parte causa de ello. Entre vals de boda, temáticas de quinceañeras, audios virales y trends de TikTok, la historia y su atmósfera sonora se expande y sostiene entre quienes sueñan con el amor eterno que va más allá de una historia sobre vampiros.