Entrevista con L E O: "Nuestro Universo", aprender a seguir

Entrevista con L E O: "Nuestro Universo", aprender a seguir

La escena musical independiente española se consolidó en la industria a finales de los noventa y posicionó sus bases con proyectos como Love of Lesbian, El Columpio Asesino, Dorian, entre otros. Gracias a ello, desde 2003, Leo López ha gestionado el backstage de los proyectos más destacables de la comunidad castellana y ha estado inmerso en el auge de esas propuestas que, hoy en día, son mundialmente reconocidas.

Su carrera profesional caracterizada por la evolución y resiliencia, y sus alianzas con figuras clave del indie español hicieron posible el lanzamiento del proyecto solista de L E O, que este 2020 finalmente vio la luz con la publicación de su primer EP titulado Media Parte, el cual se trata del primero de una serie de materiales consecutivos.

El pasado 4 de diciembre L E O estrenó "Nuestro Universo", un nuevo single que formará parte de su próximo compendio de estudio, y que evidencia los estragos y la proliferación creativa de su empresa musical en los tiempos de la pandemia mundial.

Platicamos con Leo al respecto de su situación durante el confinamiento, sus nuevos lanzamientos, su trabajo con Lisandro Montes de Dorian y de su evolución profesional y artística a través de los años.

Resiliencia

¿Cómo te ha ido, desde Barcelona, con esta fase de la pandemia que se vislumbra interminable?

Ha sido un año malísimo. Lo único rescatable es que he sacado bastantes canciones este año y la gente las ha recibido muy bien. En general, a nivel personal y laboral ha sido un año bastante jodido. Se lleva como se puede. 

Llevo un tiempo en casa componiendo y grabando….

Sí, es lo que he podido ver a través de tu Instagram. Has adaptado una especie de estudio en una parte de tu recamara…

Sí, abajo de mi cama me he montado un estudio con unas maderas arriba. Y encima me he montado un búnker. Ahi tengo mi bajo, guitarra, sintetizadores, batería, grabo voces y hago un poco de todo. Le envió pistas a mi amigo que me ha apoyado en la producción, él trabaja desde casa y estamos en constante comunicación para ir redondeando los temas.

Está increíble pues por lo que mencionas, tus procesos de creación musical han apaciguado, de cierta manera, el síntoma agobiante de la pandemia…

Es verdad. Al principio de este año me sentía metido en la mierda porque no había trabajo y estaba todo mal. Pero he intentado aprovechar el tiempo y tratar de encontrar esa motivación y esa energía para ponerme a componer y grabar. A veces me he tenido, de verdad, que obligar a ponerme a trabajar; ha sido una lucha interna entre estar tirado y levantarse a hacer cualquier cosa.

Te entiendo perfectamente y me identifico mucho. Creo que este año me ha costado muchísimo levantarme de la cama para hacer cualquier cosa, encontrar esa motivación que me ayude a seguir adelante. Pienso que la creatividad, cuando surge, definitivamente puede funcionar como un impulso…

Así es. Hay un impasse en el que uno tiene que hacer ese esfuerzo por hacer el trabajo y una vez que arrancas no paras. Lo bueno de esta pandemia es que la noción de los quehaceres y los tiempos se ha derribado. Puedo empezar a las cuatro de tarde a trabajar y extenderme hasta las cinco de la mañana grabando, sin tiempo ni horario, y eso te lleva a unos niveles de creatividad impresionantes. Y a veces no, porque resulta que te desvelas hasta la madrugada mezclando y al día siguiente te das cuenta que tu trabajo no es tan bueno.

Música para seguir adelante

Y hablando sobre tu proliferación creativa y sobre ese impulso para seguir adelante, el pasado viernes publicaste “Nuestro Universo”, tu nuevo single, que precisamente versa sobre lo que se viene en la vida tras una pérdida o, como yo lo veo apegado a términos de la canción, una ruptura amorosa…

Es un tema que compuse a principios de año y si aborda un proceso de una ruptura, de algo personal, pero se puede extrapolar a muchos temas, a esas experiencias de pérdida de un trabajo o momentos en los que tu cotidianidad caduca o se para y tienes que arrancar de nuevo; o comienzas y sigues y aprendes a vivir de nuevo o te hundes. Tienes que alejar esos pensamientos y recuerdos que te hacen daño…

Estoy de acuerdo. Creo que se puede aterrizar la interpretación a seguir adelante de cualquier duelo. En la letra de la canción mencionas que se tiene que continuar con la vida y purgar tus pensamientos, pero ¿Qué consideras que se puede hacer y cómo se puede aprender a vivir después de ese reajuste en la realidad?

Yo creo que se tiene que aprender a vivir de nuevo en el sentido de que se tiene una rutina en la complejidad de la vida que con el tiempo se va transformando y desaparece, y la mejor manera es darse de golpes para entrar a una nueva forma de vida, buscar nuevas costumbres, nuevas pasiones, nuevos hábitos que, aunque sean negativos, con el tiempo se podrán modificar….

Es bastante curioso porque, a principios de año, además de tener que lidiar con la pandemia, me acababa de separar y estaba hecho un poco, un desastre. No tenía horarios, comía a cualquier hora… pero poco a poco me fui acomodando, fui llevando el barco hacia la salida de la tormenta para estabilizar la situación.

Sin dudas es una situación que puede definir muy bien por lo que muchos hemos tenido que pasar por este año y que complejiza aún más el mensaje de “Nuestro Universo”, la cual además de publicarla en todas las plataformas digitales ha sido lanzada con un videoclip oficial que me hace pensar mucho en los métodos de creación autogestivos que emergen de las condiciones actuales, pues en el video te vemos conduciendo por la carretera, cantando el single a luz del día, y sobre las imágenes aparecen unos gráficos que convierten al visual en una especie de lyric video

Yo quería grabar un video y como lo mencionas, hay dos factores: uno de ellos es el presupuesto para poder rodar algo realmente bueno y también encontrar a alguien que realmente pueda hacer algo bueno y que pueda conectar con el proyecto y con mis ideas. Cuando pensé en las imágenes del videoclip me surgieron varias ideas relacionadas con mis giras y viajes, y un día puse el móvil en el sostén del GPS, puse la cámara frontal y comencé a grabar sin pretensiones de hacer el “video de la vida”. Simplemente grabé unos clips, hice algunos playbacks y lo monté en casa. 

La verdad es que siempre he realizado bastante autogestión de mi música, entonces tengo algo de práctica con softwares de edición. Una vez que terminé de montar todo sentía que faltaba algo y empecé a dibujar en la tablet, a escribir las letras y las puse en el editor pero seguía sintiendo incompleto el videoclip y ahí fue cuando comencé a diseñar algunos bocetos, sin estar pensando y sin ser precisamente un buen dibujante, me deje llevar e hice una especie de collage con lo que tenía; intento no ser muy racional con mi creatividad porque la razón te puede frenar demasiado, es mejor lanzarse y después ordenar.

Media Parte, tu EP pasado, fue presentado como el primero de una serie de nuevos materiales. Deduzco que "Nuestro Universo" es un corte de esos nuevos materiales. ¿Puedes platicarme un poco sobre la nueva música que planeas lanzar?

La idea es ir lanzando canciones y darle un tiempo vital a cada una, no apresurarse, pues yo creo que las canciones van creciendo poco a poco para que puedan ser disfrutadas. He estado grabando y componiendo continuamente todo este año con Intromusica, que es mi discográfica, y con Lisandro Montes, que ha estado conmigo en la producción. Cuando proyectamos un lanzamiento recopilamos las maquetas que hemos grabado y pensamos por dónde iríamos, qué sonidos y qué emociones transmitir, y elegimos los temas, probamos estas nuevas canciones con nuestro círculo social cercano y vemos cómo funcionan.

Los próximos lanzamientos probablemente sean publicados a finales de enero o principios de febrero. Estoy trabajando en dos canciones, pero aún no se si saldrán juntas. Lo que sí es que serán muy buenas sorpresas.

Del backline a L E O

Ahora que lo mencionas, cuéntame cómo ha sido trabajar con Lisandro Montes de Dorian en la producción de tu música.

Yo conozco a Lisandro desde el año 2003 cuando llegué a Barcelona. Toqué en varios de sus proyectos durante algunos años y después nuestros caminos se bifurcaron, él y haciendo música y yo, en el 2010, colaboré como backline con Dorian en la gira "10 años y un día". Gracias a esta experiencia volvimos a coincidir.

Siempre le he pasado a Lisandro grabaciones mías. Es un buen amigo y es alguien que te da opiniones sinceras, siempre ha sido muy honesto con mi trabajo. Un día le envié una maqueta que le gustó mucho y me ofreció su apoyo como productor, a lo cual acepté encantado y desde entonces le he enviado toda mi música para que intervenga con su estilo.

Lo que le envió a Lisandro está muy cargado de guitarras, pues es mi instrumento predilecto además del bajo, y él me limpia ese sonido y sustituye por sintetizadores; ordena la estructura y, en general, optimiza las composiciones. De repente hay una lucha entre lo que te gusta y la confianza en tu compañero porque, a veces, no es fácil tener todo claro en cuestión de arreglos y demás, pero si a él le gusta entonces cedo y confío su criterio.

Me parece muy interesante tu posición dentro de la industria musical pues, como señalas, has estado involucrado en varios sitios durante mucho tiempo. A veces detrás o a veces al frente de los escenarios. ¿Cómo ha sido ese salto de estar más involucrado en el backstage de la industria a tener un proyecto musical como solista?

Durante todos estos años he tenido distintos proyectos y llevaba un par de años componiendo, sin hacer nada más que eso, ni tocar ni nada, y trabajando para bandas como Love Of Lesbian o Dorian, y demás proyectos de la escena independiente española. Con ellos trabajé como Stage Manager, backline y más. Después de todo, el detonante para decidirme a crear mi proyecto fue esa maqueta que le envíe a Lisandro y esa propuesta de colaboración en la producción. Yo no tenía banda y la alianza con él me ayudó a llevar a cabo mi música. Cada vez la música fue agarrando más cuerpo y empezamos a hacer las cosas más enserio, empezamos a involucrar a más personas: a Santi Balmes, Marc Gili de Dorian y más músicos que decidieron colaborar.

Siempre me ha interesado cómo los artistas perciben el entorno musical en las que están inmiscuidos. Y tu que has estado involucrado durante muchos años con la industria independiente ¿Cómo percibes a la escena española con el paso del tiempo?

Ahora mismo siento que la escena está cambiando. Cuando yo empecé a estar más involucrado, por allá del 2009, la música independiente estaba viviendo un auge, había muchos sitios donde tocar y muchas bandas con propuestas muy buenas. Pasaron los años y lo que veo ahora es un cambio en la tendencia; parece que el indie va perdiendo terreno frente a los géneros urbanos y frente a la música hecha por gente más joven.

¿Y qué opinas de esa evolución de la escena?

Pues los géneros urbanos quizás sean la tendencia masiva pero también hay otros sonidos que afloran y me parece bastante bien, es algo natural; los cambios en las generaciones son naturales. Siempre intento estar atento y al pendiente de las nuevas propuestas y trato de disfrutarlas.

Lo que a mi me molesta de las tendencias es cuando se convierten en genéricas. Por ejemplo, Rosalía se hace popular y después salen diez "Rosalias" detrás. Eso me aburre y creo que es lo negativo de la masificación de los sonidos en auge.

Hablando sobre evolución, ¿Cómo se posiciona L E O frente a MOGH y Edeleito, tus proyectos del pasado?

Con todos los proyectos he ido experimentando y saciando las ideas y sonidos que quiero probar. Por ejemplo, con Edeleito no quería grabar guitarras eléctricas, quería guitarras acústicas o españolas y no había platos en la batería. Me gusta mantenerme en una línea pero siempre explorar nuevos sitios para no aburrirme. Conservo gustos del pasado pero también me he ido renovando.

Ya esta por terminar este 2020 que ha sido eterno pero que también ha traído muy buena música. En Naufraghost estamos en esa etapa del año de seleccionar la mejor música de los 12 meses que han transcurrido y me gustaría saber ¿Cuáles son tus álbumes, proyectos, y/o canciones favoritas del 2020?

Para no caer en bandas demasiado conocidas pues me gusta sorprenderme con proyectos más pequeños, puedo mencionar el álbum que ha sacado Barbi Recanati, titulado Ubicación en Tiempo Real. Es el trabajo que más me ha gustado este año en términos del sonido, las canciones y la interpretación. Y también he conocido un proyecto que se llama Isla de Caras, que de verdad me ha gustado bastante.

Y supongo que algo de eso que has escuchado durante el año debe resonar en tu proceso creativo...

A veces sí y a veces no. Puede ser música que te gusta y que disfrutas pero no hay manera que puedas absorber algún sonido de ella. Porque puede que no sea similar a lo que haces.

Soy muy variado con lo que escucho; puedo escuchar un disco de reggae, Led Zeppelin, Beastie Boys o algo muy moderno y me agrada. A veces sí me influyen algunos aspectos de lo que escucho pero otras veces no porque no encuentro la manera de insertar esos estilos en lo que hago o influyen de una manera inconsciente en mi música.

Hay cosas que definitivamente me han influido pues me gusta la instrumentación o la forma que utilizan ciertos elementos. Eso me ocurrió con Future Islands cuando hicimos las primeras canciones de Media Parte. Dejamos de utilizar tantas guitarras y comenzamos a utilizar más sintetizadores.

Creo que es una influencia que se puede percibir bastante bien. Porque, incluso, esa inserción de sintetizadores en Media Parte construye una estructura más atmosférica y no tan enfocada a temas bailables, tal cual lo hace Future Islands.

Exacto, los sintetizadores son más como colchones, son atmósfera. Es un synthpop con un tinte indie y oscuro en la canción, no es tan bailable aunque claro que se puede bailar.